Insólito lo que acaba de ocurriren el Benito Villamarín mientras se disputaba el tan esperado derbi sevillano. Cuando apenas quedaban escasos cinco minutos para finalizar la primera parte del encuentro, el videomarcador de Gol Sur se ha fundido y durante unos segundos ha permanecido apagado. Hasta aquí todo normal,poca gente reparó en ello pues los problemas técnicos suelen ser habituales y el encuentro está siendo entretenido, sin embargo un murmullo creciente ha recorrido el graderío del coso verdiblanco que ha tornado en asombro general tanto de los béticos como de los sevillistas presentes cuando poco a poco iban cayendo en la cuenta de que el videomarcador había vuelto a funcionar, pero en él no se emitían los habituales escudos de los equiposy el resultado, sino un partido Manchester City-FC Barcelona del nuevo FIFA 2016.
Según se está comentando en las redes sociales, todo ha sido obra de un pirata informático que gracias a sus conocimientos tecnológicos ha logrado introducirse en la red del sistema informático bético y ha conectado su consola con la macropantalla del estadio.
El jugador parecía ser todo un experto en el juego pues se ha puesto a realizar todo tipo de virguerías con Douglas (el del Barça) lo que ha desatado los olés de todo el respetable y diversos comentarios de admiración debido a la dificultad de la maniobra con un jugador que apenas tiene un 65 de media en técnica. Sin embargo, el momento álgido ha tenido lugar cuando dentro del partido virtual ha saltado al terreno de juego a modo de espontaneo el negro del pollón del whatsapp con una pancarta en la que se podía leer "TEBAS, CABRÓN. ¡ESTO ES SEVILLA Y AQUÍ HAY QUE MAMAR!". Tal fue el estruendo y la ovación que se llevó esta fugaz aparición, que hasta los jugadores del Betis y del Sevilla relentizaron durante breves segundos el partido sorprendidos intentando entender que ocurría mientras que los suplentes, rendidos a la evidencia, reían y aplaudían desde el banquillo la ocurrencia del aun desconocido hacker que ya es trending topic en Sevilla.